Del 1 de enero al 5 de noviembre, en el estado de Baja California se han reportado 100 incendios forestales, siendo Ensenada el municipio con el mayor número de siniestros, con 59, seguido de Tecate con 25, Tijuana 11, Playas de Rosarito 4 y Mexicali 1, informó a la Comisión Nacional Forestal (Conafor)
La Conafor continúa trabajando en la verificación de la superficie afectada, pero reporta preliminarmente 24 mil 502 hectáreas afectadas por los siniestros, de la cual 59% es de vegetación arbustiva, 34% herbácea y 5% de arbolado.
Las causas probables de estos incendios son la quema de basureros, fumadores, vandalismo, de tipo desconocido y en menor medida las actividades agropecuarias, limpia de derechos de vía y causas naturales como rayos.
Debido a que la superficie mayormente afectada corresponde a chaparral, la cual es una vegetación adaptada al fuego, está evolucionado para recuperarse rápidamente.
Por otra parte, luego de la atención de incendios forestales del periodo del 24 de octubre al 2 de noviembre, la Conafor dio a conocer que ya regresaron parte de los recursos nacionales que se enviaron en apoyo a la entidad, como son las brigadas de combatientes del Estado de Sinaloa y los técnicos especializados del Centro Regional de Manejo del Fuego Noroeste (CRMFN).
Entre recursos que quedaron asignados fueron las brigadas y técnicos de Nayarit, Sonora y Durango para actividades de recorridos y vigilancia en áreas prioritarias.
El personal que participó en las diversas actividades de los incidentes fueron técnicos especialistas en el Manejo del Fuego del Centro Regional del Manejo del Fuego Noroeste, Guerrero, Yucatán, Coahuila y Durango; vehículos especializados, equipo aéreo proporcionado por la Secretaría de Marina y la Policía Federal-Guardia Nacional y se desactivó el Sistema de Comando de Incidentes.
La movilización de los recursos fue en respuesta a los incendios forestales que se dificultó liquidar con sólo recursos estatales debido a que el fenómeno de la condición Vientos de Santa Ana (Vientos Foehn) dificultaba su extinción por las condiciones de la velocidad que alcanza hasta 95 km/h.
Finalmente, la CONAFOR reconoció la importancia de la coordinación institucional para atender dicha contingencia, en la que participaron: Protección Civil federal, el Gobierno Estatal a través de Protección Civil y la Secretaría de Protección al Ambiente (SPA), los gobiernos municipales, la Secretaría de Marina (SEMAR), la Secretaría de Defensa Nacional (SEDENA), la Guardia Nacional, la Policía Federal (PFP), voluntarios previamente capacitados, las brigadas oficiales de la CONAFOR de seis entidades, el cuerpo de bomberos de Tijuana y la participación del Centro Regional de Manejo del Fuego Noroeste con sede en Sonora.
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